El día de hoy se preveía complicado para la salida en bici. Las amenazas de lluvia eran fundadas desde que el día de San José empezara a llover...sin embargo la tregua que nos había dado el tiempo en el día de ayer parecía que nos permitiría librarnos y contar con una ruta ciclista tranquila. Cambiábamos el horario de salida, pasando a las 8, y el cielo amanecía nublado pero de momento sin llover.
Éramos pocos los que nos juntábamos en la zona de salida: Pascual, Maciá, Félix, Eric, Peter, Héctor, Malan y Harrie. Por delante se adelantaba Maikel.
La ruta era un auténtico rompepiernas. Consistía en bajar a Calpe y subir Pedramala, para posteriormente is hasta Teulada y bajar a Moraira, para volver a subir a Benitachell e ir hasta Jávea. Allí parabamos a almorzar en el bar Posada. Pascual hizo un amago de subir les planes pero se lo pensó (ejem....no digo nada...:))...y nos vino bien porque así avisaba a Maikel (que nos estaba esperando dentro del pueblo) que el almuerzo sería en el bar Posada.
Al llegar Maikel al bar nos comentaba que había tenido una avería con una de las bielas. Por tal motivo, él, junto con Félix y Malan, optaron después del almuerzo por ir a Benissa por Benitachell y Teulada. El resto, como era de esperar y a pesar de la amenaza de lluvia, que cada vez era más creciente, seguiamos el recorrido marcado en la ruta y subimos les Planes. Al llegar arriba ya sabíamos que la lluvia no nos iba a perdonar, y el chaparrón estaría garantizado...solo faltaba saber si sería intenso o leve. Al final no fue tanto como se preveía, pero sirvió para que nos dejara totalmente mojados, sobre todo los pies. Al llegar a Pedreguer a penas llovía, y en Gata ya estaba la carretera seca. Allí nos volvíamos a encontrar con Félix, quien después de dejar a Malan venía al encuentro al observar que en Benissa no llovía.
los zapatos empapados por la lluvia